Comunicadora en acción: LA RADIO, MI FIEL AMIGA

« La radio seguirá siendo indispensable para cubrir la actualidad de cada región del mundo y de cada país, en tiempo real y permitir que los jóvenes encuentren su "color musical" predilecto ». Hervé Bourges

AUTORA: Liz Andrea De La Cruz Paima.

RESUMEN: La programación de una emisora radial, debe buscar sobre todo la participación de todas y todos. Los géneros que se encuentran inmersos en éste, ya sea el género dramático, o el uso de cuñas deben buscar generar en el radioyente la participación activa en una emisora, involucrarlos en esta aventura radiofónica depende de la manera cómo llegamos a cada uno de ellos.

PALABRAS CLAVES: PROGRAMACIÓN – PARTICIPACIÓN – DRAMA- CUÑAS

DESARROLLO:

Había una época en que las familias solían sentarse alrededor de una mesa, con el único propósito de disfrutar, de divertirse, o emocionarse con los programas que se emitían en la radio. Años después este sería desplazado por la aparición de la televisión, pero contrariamente a lo que se pensó con la llegada de la televisión, la radio no dejó de existir, sino que se reinventó. El filme estadounidense “Días de la Radio” producida Woody Allen no es más que una película que utiliza tan sólo como hilo conductor la radio, para retratar a la sociedad norteamericana de aquellos tiempos, el filme se ambienta en la década de los 40, y de manera fogosa retrata como es que la radio influía en el comportamiento de los integrantes de una familia, desde el más pequeño de la familia, que ve como su familia desde el primer momento del amanecer hasta la última hora de la noche, vive literalmente pegada a un aparato que no se apaga excepto cuando todos duermen. El pequeño protagonista Joe y su familia viven aventuras y anécdotas ligadas a la radio, en contraste a los adinerados que son las estrellas que participan en radio frente a los pobres y siempre fieles oyentes. Pero lo más importante es resaltar como este productor pudo retratar a una familia norteamericana a través de los programas radiales, como es que sus vidas se veían para bien o para mal tan influenciadas por los mensajes que se emitían por este peculiar aparato. Es esta década donde la radio jugaba un papel central en la vida de muchos estadounidenses, y algo peculiar es como a pesar de las diferencias que podían tener los miembros de la familia protagonista en lo único que se ponían de acuerdo era para escuchar la radio. La época dorada de la radio llegó a su fin. Aunque tampoco diría que la radio ha dejado de ser un medio que se haya sentido desplazado por los medios audiovisuales y la convergencia de herramientas tecnológicas, aunque las familias ya no se concentran en la sala para escuchar la radio, pues ahora la radio no se ha vuelto el acompañante de las familias, ahora se ha vuelto el acompañante de uno, te acompaña en tu trabajo, te acompaña cuando transitas por las calles, ahora es fiel amiga de cada persona que le brinde un espacio en su quehacer diario, ella te acompaña, y uno disfruta sin duda de su compañía, es la programación que emite en algunos casos segmentada y dirigidos a determinados públicos, es por eso usual que mientras el padre de familia escucha noticias en una emisora radiofónico, el hijo escucha a todo volumen la música de su predilección en una emisora, y la madre una emisora donde trasmite la música que le hace volver a vivir aquellos tiempos que siempre suele recordar con nostalgia. Sea cual sea la emisora radial que escuchen de alguna u otra forma aún sigue influyendo en el comportamiento de muchas personas.

Y ahora para quién realizo un programa radial

Mario Kaplún al referirse a la radio dice “Si la radio, mirando dentro del mismo marco, "está al alcance de todos, alfabetos y analfabetos, pobres y ricos, poblaciones urbanas y campesinas", de oyentes sedentarios y de personas que por diferentes razones se desplazan de uno a otro lugar, a toda hora del día y la noche, fácil es admitir el alcance de su influencia y sus perspectivas de ampliación en "aquellos conglomerados sociales que no tienen acceso a otros medios de comunicación", y aun de aquellos que teniéndolo a los otros recursos audiovisuales, -como la televisión y el internet- consideran convenidamente a la radio como la acompañante preferida para entretenerse con sus programas favoritos o misceláneos, o informarse de lo que ocurre en el mundo externo y en su propio ámbito.” Cuánta razón tiene Kaplún, es que es cierto la programación variada que pueden tener emisoras radiales hace incluso que la radio se convierta en la predilecta por encima de redes sociales y la televisión, aún no descubro muy bien si es por su accesibilidad o porque durante tanto tiempo su presencia se ha convertido en un miembro más dentro de nuestra existencia, una amiga. Los tiempos han cambiado y es necesario hablar para un público específico, es necesario ponernos en los zapatos de nuestros radioyentes y saber que ahora estos no sólo buscan ser simples oyentes, ellos desean participar, ellos necesitan saber que también son parte de la radio. Los radioyentes desean escuchar sus historias, escuchar sus experiencias, ser protagonistas y porque, porque como no entender aquello que tus has vivido. CALADRIA en el libro Cultura de Masas y radio popular en la radio peruana, menciona un ejemplo en particular, unas señoras de Alta Pamplona, en Lima, a pesar de sintonizaban aquellas radionovelas del “Ronco” que se emitían por Radio. Ellas decían: “Bueno, en primer lugar, las radionovelas de radio mar son muy lindas pero son diferentes a las nuestras, porque las nuestras las hacemos nosotras y no se mete el “Ronco”. Porque el “Ronco” sí se mete y está ahí y es bonito que se meta pero no en nuestra historia, él la cambia. En segundo lugar “no hay suspenso” porque todo acaba el mismo día”. En este ejemplo aquellas mujeres no negaban escuchar las radionovelas emitidas por radio Mar, pero les parecía que no reflejaba su realidad, por lo tanto creo que deseaban ser protagonistas de sus propias historias, incido en este punto del protagonismo porque si en los programas de radio que se puedan emitir en una emisora radial, no se busca contextualizarlos a la comunidad o público a quien nos dirigimos entonces no tendrá el efecto deseado que se busca en un proceso comunicativo. Es por eso que muchas veces las locutoras y locutores, tan sólo deben ser intermediarios, o mediadores que buscan generar una relación estrecha y de confianza entre el radioyente y la radio.

RADIONOVELAS ¿Qué eso no quedó atrás?

El género dramático en radio, es un género que está siendo olvidado, y relativamente dejado de lado dentro de la programación de muchas emisoras radiales, creo que a veces por el desinterés o el no querer invertir tiempo en la realización de formatos dramáticos en radio.

Sin embargo son los dramatizados los que nos permiten ser cómplices de situaciones vividas por los personajes, estemos de acuerdo o no con ellas. Al escuchar un drama radiofónico podemos obtener elementos para saber qué les suceden y porque actúan como lo hacen. Por medio de este tipo de formato nos invita a pensar de una u otra manera que apoyemos o rechacemos la actitud de determinado personaje, además nos invita a reflexionar sobre los temas que presenta pero, sobre todo sobre nuestras propias reacciones.

Pero porque apostar por realizar programas de este tipo de formato, no es un simple capricho, pero pensemos, la vida de cada persona, la vida de las familias, de las comunidades, y de los países se encuentran llena de cosas que acontecen. Hay que tomar decisiones entre múltiples oportunidades, hay que enfrentarse a la adversidad o luchar por una causa, es que esta vida se encuentra llena de situaciones sobre las que es necesario tomar decisiones trascendentales. Es que las preguntas y conflictos existentes en nuestra vida nos mueve a actuar. Si nuestra vida se encuentra llena de búsquedas de soluciones para conflictos, y si tenemos una radio que se ha comprometido en construir una sociedad que supere sus limitaciones, pues apostará por los dramatizados ya que éstos sin duda son una herramienta que tiene ese objetivo. Apostar ahora por los dramatizados si vale la pena.

MENSAJE CORTO, PERO PRECISO: CUÑAS RADIALES:

Y ya casi para terminar no me quiero ir, sin antes referirme acerca de las cuñas radiales, que son mensajes breves que pretenden vender algo, teniendo en cuenta los públicos objetivos. Según Miguel Ángel Ortiz y Jesús Marchámalo la cuña es un “Anuncio de corta duración -en general no más de 60 segundos- que se emite a lo largo de la programación y es totalmente autónomo, en contenido y estética, respecto a los programas en los que se inserta”. Otros autores precisan “Anuncio pregrabado, totalmente autónomo en contenido respecto a los programas en los que se inserta, con una duración media de 30 segundos.”. la cuñas de radio es un formato de publicidad donde juega un único sentido, el oído, es por lo tal necesario hacer hincapié en factores como la locución, efectos de sonido, música y una buena idea para conseguir un mensaje que llegue al radioyente, pero que llegue bien. El objetivo de una cuña radial es el de impactar en el radioyente para que recuerde un determinado producto o servicio.

Conclusiones:

La radio en su aparición, en la década de los 40, en los sesenta, ochenta, noventa y en nuestros días, siempre será aquella que aguarda, que espera, no obliga, no exige, pero sin embargo informa, cuenta, involucra, y por siempre será fiel amiga y compañera.